“¡No estamos jugando! ¡Las matemáticas no son un juego!”. Puede que cuando eras niño o niña y te enseñaban matemáticas escucharas algo así. Puede incluso que algún compañero o compañera docente siga creyendo que juego y matemáticas no caben en la misma ecuación. Pero si algo hemos aprendido en tekman es que cuando los alumnos tocan, se ríen, manipulan y, en definitiva, juegan, el aprendizaje es mucho más significativo y profundo. De hecho, enseñar matemáticas a través del juego es algo que funciona, tal y como pudimos comprobar recientemente.
También debemos saber que no todos los juegos, aunque aparezcan números, contribuyen al desarrollo dela razonamiento matemático. Si de verdad queremos que aprendan matemáticas, los juegos deben estar diseñados para trabajar contenidos y habilidades matemáticas específicas. Eso significa que deben tener una serie de características específicas para favorecer la competencia de resolución de problemas mediante el juego.
Te lo explicamos a continuación y, además, te ofrecemos algunos Matijuegos extraídos de nuestro programa de matemáticas EMAT para que los pongas en práctica desde ya mismo.
Enseñar matemáticas a través del juego
A continuación te explicamos qué características deben tener los juegos para favorecer la competencia de resolución de problemas.
1. Entender el problema o las reglas del juego
El primer paso de la resolución de problemas es entender el problema. Para ello, el juego debe tener un objetivo y unas reglas claras y coherentes. Entender bien lo que pide el problema, los datos que aporta y el contexto donde se plantea; y entender los requisitos, los movimientos y como se gana.
2. Idear un plan para resolver el problema o ganar el juego
El juego debe permitir la construcción de un plan o estrategia para ganar. Además, es importante recordar si se ha jugado a un juego similar y, de nuevo, pensar en posibles estrategias para ganar. Así tus alumnos podrán…
- Recordar problemas parecidos que puedan resultar más familiares e ideas matemáticas que puedan ser útiles.
- Hacer conjeturas matemáticas adecuadas, experimentar, estimar, tantear.
- Planificar estrategias de resolución.
3. Resolver el problema o ejecutar el plan en el juego
El juego que diseñes debe permitir al alumno aplicar los movimientos de ataque u oposición para que el jugador progrese en el juego hasta ganar la partida, validando la estrategia y corrigiendo si es necesario, según avanza la partida. Con ello, como sucede en la resolución de problemas, los alumnos conseguirán:
- Comprobar las conjeturas matemáticas propuestas y si es necesario mejorarlas.
- Aplicar conceptos y herramientas matemáticas para desarrollar las estrategias y resolver el problema.
- Rehacer el proceso si la estrategia no funciona.
4. Analizar y evaluar el resultado del problema y del juego
Es importante validar si la estrategia utilizada es la mejor. Una vez realizado, es importante seguir estos tres pasos:
- Plantear si la solución es razonable, aunque sea correcta matemáticamente.
- Analizar la estrategia empleada, ¿se ha elegido la más eficaz? ¿Existe otra estrategia alternativa para resolver el problema?
- Incorporar la estrategia para resolver problemas similares.
Matijuegos para el aula: ¡descárgalos gratis!
Después de esta explicación, te animamos a que descubras los Matijuegos, divertidos juegos de mesa que utilizamos en nuestro programa de matemáticas EMAT para practicar las habilidades matemáticas y desarrollar el aprendizaje mediante la colaboración. Con los Matijuegos, tus alumnos harán mucho más que jugar. ¿Quieres comprobarlo? Te ofrecemos algunas actividades gratis para tu aula de Infantil y Primaria:
Tus alumnos podrán demostrar y repasar los conceptos matemáticos por medio de la experimentación y la práctica, a la vez que fomentan el trabajo colaborativo y desarrollan sus habilidades sociales, colaboran entre sí, comparten y se ayudan para conseguir un objetivo común.
